lunes, 23 de enero de 2012

EL PODER DE NUESTRO ÁRBOL GENEALÓGICO

Todos y cada uno de nosotros somos únicos. No hay un ser irrepetible en ningún rincón de este mundo.

Muchas veces nuestros padres y abuelos siempre han insistido en que fuéramos "iguales a ellos", intentando inculcarnos lo que ellos han aprendido. Y por tanto, para ellos en su día lo correcto.
Ésto es debido quizá a los genes. Esos genes que inevitablemente, han ido pasando de generación en generación y por su puesto la  educación recibida.

Esta claro que esa parte genética se encuentra dentro de nosotros, pero hay otra parte que nos condiciona, esa parte que no viene de dentro si no del exterior.

Quizá mi generación, "La generación pérdida" (como llaman algunos). Será la que debe romper con esas barreras que a veces la sociedad y la educación nos impone. Esos condicionamientos que a veces nos han influenciado de forma inconsciente y  que nos han hecho que algunos dejemos de ser nosotros mismos.


Debemos inculcar a los que vienen detrás nuestro, y a nosotros mismos, que para encontrarse así mismo, no debemos buscar en el exterior. Si no al contrario. La búsqueda de uno mismo, es un viaje hacia nuestro interior
.
Las personas curiosas e inquietas podemos realizar este viaje y averiguar qué es lo que realmente somos.

Porque una pequeñísima parte de tí, forma algo distinto en tí, que es lo que te hace diferente del resto de los demás. Y esa pequeña motita de polvo será la que guiará tu vida hacía lo que realmente has venido hacer aquí.

lunes, 9 de enero de 2012

EL CAMBIO

La vida esta cambiando constantemente. No hay nada estático. Desde la partícula más pequeña, hasta algo tan grande como nuestro planeta, está siempre cambiando.

Y entonces, por qué nosotros que estamos hechos de esas partículas, de células que  cambian constantemente, no vamos a cambiar.

Nuestra psique, nuestra manera de pensar va cambiando dia a dia, año tras año.

Si nos empeñamos en no cambiar, estaremos luchando contra algo que no es natural en nosotros.

Vamos creciendo y muriendo a lo largo de la vida. A través de nuestras experiencias, nuestro entorno, cambian nuestras relaciones con los demás. Algunas se estrechan más, otras se separan o alejan, otras se pierden por el camino para siempre. Y otras con las que se forman lazos que quizás duren toda la vida.

En una época de cambios o de crisis. Es una época para favorecer el crecimiento personal. Un crecimiento que nos llevará a un nivel más alto de inteligencia. A un nivel más alto de entendimiento y comprensión hacia los demás.

Cuando surgen novedades en nuestra vida, en nuestro cerebro se crean una serie de cambios. Cambios fisicos que nos afectan a nivel personal.

Esto es porque nuestro cerebro se está amoldando a nuevas experiencias que hasta ahora no reconocía. Se crean nuevas conexiones entre las neuronas. Ante esta nueva situación, el cerebro necesita un tiempo. Un tiempo para desarrollar esas nuevas conexiones, para acoplarse a su nueva forma de seguir conectado al mundo que le rodea.

Nuestro cerebro es como una esponja. Cuando somos niños, esa esponja está practicamente vacía de experiencias, y por tanto absorvemos gran cantidad de información que nos ayudará a sobrevivir los primeros años de vida. Pero cuando llegamos a la edad adulta nuestro cerebro ya no absorbe con tanta rapidez la información que le llega del exterior.

El adulto entonces, se vuelve vago a los cambios. " Porque cambiar a una edad adulta después de todo lo aprendido se vuelve difícil."

Pero, por qué no "desaprender" lo que hemos aprendido y que quizá ya no nos sirve para seguir sobreviviendo en este nuevo mundo que va cambiando...